La piedra artificial está fabricada por el hombre con cementos o arcillas, por ejemplo, el hormigón o la cerámica. En cambio, la piedra natural es la que se extrae directamente de la naturaleza. Ambas se utilizan mucho para construir y decorar paredes, muros y fachadas principalmente.
La piedra artificial es una opción ecológica, es un producto reciclable que respeta el medioambiente y favorece al ahorro energético gracias a su gran capacidad de aislamiento. Además, es resistente como la piedra natural, no necesita mucho mantenimiento y es fácil de montar.
Beneficios de la piedra artificial
Ya conoces un poco más lo que te puede ofrecer la piedra artificial en tu hogar pero a continuación se enumeran los beneficios en detalle:
- Ligera. La piedra artificial es ligera porque pesa poco así que la instalación y el transporte se harán cómodamente y rápido.
- Resistente. Este material es resistente por su dureza, algo imprescindible para fachadas y paredes de exteriores que tendrán que luchar contra las temperaturas extremas.
- Funcional. Es transpirable y de secado rápido así que se instala en exteriores o interiores.
- Sostenible. Gracias a sus materiales que son de bajo impacto medioambiental y por su posibilidad de ser reciclado.
- Ahorro energético. Con la piedra artificial es posible el ahorro energético por su capacidad de aislamiento. Esto hace que la temperatura en el interior se mantenga estable y que no haya fugas de calor.
- Aislante. Además de ser aislante térmico, también lo es de lo acústico y es impermeable.
- Decorativa. Después de ver que la piedra artificial tiene unas características muy valiosas para su uso, también es atractivo que también es decorativa para la estancia de tu hogar. Hay muchos modelos para elegir dependiendo del estilo que quieras dar a tu estancia.